Los guías que no conocen de límites

DEPORTES

Lara  entrena a campeones en el sur  

En  Quito, en la piscina semiolímpica  del Colegio Montúfar, en el sur,  se  entrenan  20  chicos  de Olimpiadas Especiales  bajo  la guía de Cristian Lara,   licenciado en educación física y de 30 años.  

El entrenador prepara a sus pupilos    los lunes, miércoles y viernes, de 17:00 a 18:00. También practican los sábados de 09:00 a 11:00.  “El deporte ayuda  para  que los chicos se desarrollen física y socialmente. En el entrenamiento se  relacionan y tienen amigos. Eso les cambia la vida”, asegura el instructor, quien  trabaja  con  esta organización  hace 7 años.

En la actualidad, Lara es el director nacional de natación de Olimpiadas Especiales, una  organización en la que cerca de 20 000  personas con deficiencia intelectual   practican   atletismo, baloncesto, ciclismo, gimnasia, hockey, fútbol, natación y tenis.

Entre sus pupilos  también hay  estrellas, destacan Álex Vaca,  actual   campeón mundial de aguas abiertas, y los múltiples campeones nacionales  Lorena Caiza e Isaac Tomalá, entre otros.

Nasimba dirige a un equipo pionero

En el Instituto Fiscal de Audición y Lenguaje Enriqueta Santillán, los profesores  decidieron  apostar  con fuerza al deporte en  este año. Si bien  no  tienen    profesores especializados en educación física, un grupo de docentes del plantel se puso el equipo al hombro y formó la selección de fútbol de la entidad.

Así, por primera vez un equipo de chicos  con deficiencia auditiva   participa   en el  intercolegial quiteño.  Con este primer paso,  en el centro educativo  ubicado en  la Mena Dos, en el sur, pretenden que los chicos se integren mejor a la sociedad a través del deporte.

Uno de los entrenadores  es Leonel Nasimba, de 40 años (foto).  Es  el  instructor del taller de carpintería  pero  también asumió el reto de entrenar a los chicos.   Como ellos no escuchan, él mueve sus manos para  que lo entienda.  “Deben estar atentos a las señales que realice el árbitro”,   les explica el entrenador con señas.

“Hacemos de todo un poco.  No tenemos un profesor especializado  pero    colaboramos para  que los chicos se fortalezcan con el deporte”, dice Nasimba.   Con la selección también colaboran otros docentes como Luis Vizcaíno y la nutricionista Marlene Cumbal, entre otros.

Castro es un apasionado

En las canchas del Círculo Militar, en las avenidas Orellana y Diego de Almagro, practican los integrantes del Club Halcones. Roberto Castro es el instructor principal del lugar.

Él afirma que el tenis es un deporte apropiado para las personas que utilizan silla de ruedas. "Jugar tenis es divertido y un buen ejercicio para cualquier persona, en silla de ruedas o no", afirma el entrenador, que se considera un apasionado por este juego.

Con él también trabaja el instructor Armando Alcívar. Ambos entrenan a principiantes y avanzados en diferentes horarios. En este último grupo se destacan Edmundo Merizalde, seleccionado ecuatoriano que compite en los Juegos Paralímpicos de Guadalajara, México; y Paúl Barrios, múltiple campeón nacional de tenis en ruedas, entre otros talentos deportivos.

Ellos entrenan también baloncesto en silla de ruedas.

Reyes y los Campeones en Ruedas

Freddy Reyes (en la foto) guía al grupo Campeones en Ruedas, quienes perfeccionan sus golpes de tenis en las canchas del Círculo Militar. El grupo completo, de 12 personas entre los 15 y los 39 años, se reúne los sábados desde las 10:00. Allí se entrenan avanzados y principiantes.

Reyes, entrenador de tenis con 20 años de experiencia, incursionó en esta nueva disciplina desde hace poco más de un año. Cuando le propusieron que
entrenara a personas en sillas de ruedas , investigó y cayó en cuenta que había pocas diferencias.

"Cuando una persona practica deporte no hay discapacidad. Todas las personas somos iguales cuando entrenamos", dice el instructor manabita, que explica que la principal variación con el 'tenis en pie' radica en la cantidad de botes de la pelota. En el tenis en ruedas la bola puede rebotar dos veces.

Las raquetas y las pelotas son las mismas. Eso sí, las sillas para jugar esta disciplina son especiales y permiten una mayor movilidad a los jugadores. "El propósito es tener un grupo más grande".

Cevallos instruye mediante señas

Daniel Cevallos es el entrenador de Ángel Sánchez, deportista sordo de 15 años que se perfecciona en la natación de aguas abiertas. Dos semanas atrás, el adolescente participó del cruce San Vicente - Bahía de Caráquez, de 2 kilómetros en el mar.

Aunque fue la primera vez que nadó en una prueba en el océano, culminó sin inconvenientes la competencia. En aquella ocasión, junto con Sánchez, también participaron nadadores del grupo máster del Club Regatas.

Cevallos instruye a Sánchez desde hace 3 años. Cuando el deportista llegó a la piscina de San Carlos no podía nadar. Eso fue un reto para Cevallos, de 23 años, porque al inicio no sabía cómo comunicarse con su pupilo.

En la actualidad, el entrenador ha aprendido la lengua de señas, con la que personas sordas se comunican con las manos. "Fue todo un reto, pero ahora ya nos entendemos y sé lo que me quiere decir", asegura el joven instructor.

La piscina de San Carlos está ubicada junto al parque Inglés, al norte de Quito.

Discapacidades

Niños  y adultos   pueden   tener discapacidades    físicas, visuales, auditivas y de lenguaje  e intelectuales.    

1.600.000  personas tienen algún tipo de discapacidad  según el  Consejo Nacional de Discapacidades.    

592.000  personas  en el Ecuador  tienen  discapacidad por deficiencias físicas, según el Conadis.  

Las cifras  corresponden a una investigación del 2004 y son las que  se manejan  en  la actualidad.

Consejos

Para realizar uno u otro deporte se debe determinar el tipo y grado de discapacidad.

Es preferible consultar con un médico especializado en deporte antes de emprender la ejercitación.

Es recomendable empezar a practicar con entidades y personas con experiencia.

Utilizar ropa deportiva adecuada ayudará a tener un mejor desempeño. Hidratarse es importante.

Alternativas


En el Club Rei Sei Kan hay dos personas con discapacidad física que practican kendo, un arte marcial de origen japonés.

Fernando Benavides es el instructor en ese lugar.

Otra alternativa para entrenar natación está en la piscina de Jipijapa, en la avenida Río Coca. Allí, el instructor Rommel Chalacán tiene experiencia al guiar a personas con distintas discapacidades.

En la piscina del Colegio Montúfar, en el sur capitalino, también entrena Edilberto González. Él instruye a personas con discapacidad visual.

El Club Primos y Primas es otra alternativa deportiva para las personas con discapacidad intelectual. El director es el entrenador Juan Carlos Araujo.

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