Cincuenta años de lucha igualitaria

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La Asociación de Personas Sordas de Jerez celebra estos días su aniversario tras cinco décadas de trabajo y persistencia por conseguir que su comunidad viva totalmente integrada

La comunidad sorda de Jerez y la provincia, porque Apesorje abarca a también a muchos municipios de la sierra, está estos días de aniversario. Fue un 18 de noviembre de 1970 cuando se creó la institución, una entidad que desde entonces lleva luchando y trabajando por romper con las barreras que minan su día a día.

Sus inicios llegaron de la mano de su actual presidente, una figura fundamental para conocer lo que es hoy en día la asociación. Porque tras cursar estudios en el colegio de la Purísima de Málaga (donde la maestra Sor Cristina le explicó el funcionamiento de una asociación) y a través de su experiencia en el año 1958 en la Asociación Federada de Sordos de Málaga, Pedro Jesús Vega Ramírez retornó a Jerez, dispuesto a sentar las bases de una entidad que aglutinara a las personas sordas.

Apenas tenía 15 años, pero Pedro Jesús estaba convencido de su idea de ahí que comenzase a reclutar personas, muchos de ellos antiguos compañeros de colegio. No fue una enmienda fácil pues ese ‘reclutamiento’ se prolongó durante siete años hasta que por fin, a la edad de 22 años, el jerezano se convirtió en el primer presidente, avalado por compañeros como Luis Ramos-Catalina Gordon y su hermano Sebastián Vega Ramírez. Se daba por fin el primer gran paso.

Los comienzos, como casi siempre, fueron complicados, “empezándonos a reunir en locales cedidos como los de las calles de Pescadería Vieja, Ponce o Caballeros, en cuyo número 21 se aprobaron los primeros Estatutos de la al principio denominada Asociación de Sordomudos Nuestra Señora de la Merced, así como la primera presidencia y junta directiva”.

Durante estas cinco décadas de vida, la Asociación de Personas Sordas de Jerez ha tenido once presidentes: Manuel Martín Merino, Francisco Narbona Galera, Francisco Fernández del Castillo, Manuel Pardo Torres, José Baena Orellana, José María Rodríguez Bel, Manuel Rodríguez Gómez, José Luis Gil Muñoz, Francisco Javier Villanueva Romero y Antonio Merino Sánchez y el actual Pedro Jesús Vega, con sus correspondientes juntas directivas que a lo largo de estos años “han luchado por mejorar la calidad de vida y romper las barreras de comunicación que a diario y aún hoy, deben enfrentarse las personas sordas”.

En la actualidad, APESORJE, que es una Organización No Gubernamental, dispone de un local propio en la calle Santo Domingo número 6, sede que fue inaugurada en 1976.

No obstante, tal y como reconoce su presidente, dichas instalaciones “son insuficientes para atender a las numerosas personas que a diario acuden en demanda de servicios variados como ILSE (Intérprete de lengua de signos), Trabajo Social, ADECOSOR (Agente de desarrollo de la comunidad sorda, etc.), atención a familiares, actividades y/o información.

El hecho de haber ido aumentando la oferta de servicios destinados a la comunidad sorda ha incrementado las necesidades, de tal forma que actualmente, son hasta cuatro asociaciones las que conviven en un mismo espacio. Así, además de Apesorje, este mismo local es sede para “AJEMUSOR (Asociación Jerezana de Mujeres Sordas), GAPEMASO (Asociación Provincial Gaditana de Personas Mayores Sordas), Club Deportivo de Sordos de Jerez, y la Asociación de Jóvenes Sordos de Jerez, también con la impartición de clases de lengua de signos, con los consiguientes inconvenientes que suponen el compartir un reducido espacio y materiales”.

También cuenta con el servicio de Andalucía Orienta APESORJE que realiza su trabajo de búsqueda y asesoramiento laboral en el Centro Cívico “Blas Infante”, gracias al local cedido por el Ayuntamiento de Jerez, y que fue apoyado por la entonces alcaldesa de Jerez María José García-Pelayo “a quien debemos también su gestión para acogernos a una subvención de ICO que palió, en su momento, nuestra delicada situación económica”, recalca su presidente.

APESORJE es, a lo largo de su historia, sobradamente conocida por haber tenido caseta en la Feria del Caballo de Jerez en varias ocasiones; organización de la elección de Miss España Silenciosa en Jerez en el año 1976; o las Semanas Informativas del Mundo del Silencio durante varios años.

Además, sus socios y socias han participado en “los Certámenes de Teatro, Canción, Mimo y Poesía Silenciosa organizados por la CNSE (Confederación Nacional de Sordos de España); los Torneos Internacionales de Deportes de Playa para Personas Sordas en Rota los años 2006, 2008 y 2010; el Encuentro Internacional de Surf, Windsurfing y Kitesurf para personas sordas en Tarifa 2012 o el Festival Internacional de Teatro para personas sordas en 2008”.

“También jóvenes sordas de la asociación tomaron parte en el certamen Miss World Deaf, celebrados en 2010 y 2015; y en la elección de las Venenciadoras del Carnaval de Jerez”.

A todo ello hay que añadir “la multitud de éxitos deportivos, tanto a nivel nacional como internacional, y muchísimos otros eventos más que engrosan con gran orgullo la historia de la asociación”.

Desgraciadamente la alegría de la celebración a principios de año, con una serie de actividades programadas para la ocasión, ha quedado empañada por la pandemia, “por lo que nos hemos visto obligados a aplazarlas hasta que se normalice la situación”.

“La única actividad que hemos podido celebrar, justamente antes de la declaración de alerta sanitaria decretada por el Gobierno, fue el sábado día 29 de febrero en la Casa de la Juventud, con una exposición Conmemorativa de los 50 años de APESORJE y que contó con la asistencia de las autoridades y personalidades del movimiento asociativo andaluz de personas sordas, así como de muchas de las personas sordas, tanto socias como no, y que nos han acompañado a lo largo de estos cincuenta años, ya toda una vida”.

En este 50 aniversario, que ha sido amadrinado por su Alteza Real Infanta Doña Elena de Borbón, se tiene previsto colocar también una placa conmemorativa en la sede donde se firmaron los primeros estatutos de la asociación, situada en la calle Caballeros número 21.

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