Tortas del Gordo, 25 años de un negocio redondo

NOTICIAS DE COLOMBIA - ECONOMÍA

Medellín.-

A Ricardo Alfonso Zuluaga y Natalia Hoyos hay dos cosas que los unen: un amor más bonito que un campo de flores y el gusto por una torta bien hecha. Y esas dos cosas, para nada desdeñables, han marcado su camino. Senda que los tiene celebrando 25 años de haber creado una empresa de tortas. Pero no cualquier clase de tortas. Ambos son sordos.

Tortas del Gordo, como se conoce en el mercado de la repostería este emprendimiento familiar, basa su negocio en la tradición casera de saber amalgamar masa de harina y otros ingredientes secretos que cuecen a fuego lento y que, por lo general, le dan forma redondeada. 

A la abuela le heredaron la fórmula de la torta negra envinada. Ella, Teresita, solía reunir a la familia en torno a la delicia de hacer y compartir un pedazo de torta.

Después, por allá en el difícil 1994 —año marcado por los estertores de la guerra del Estado contra los carteles del narcotráfico y la consolidación de la apertura económica del gobierno de César Gaviria Trujillo— los herederos de la tradición vieron en ella una alternativa laboral.

Entonces, empezaron vendiéndoles el producto a familiares, amigos y vecinos en el barrio Buenos Aires, al oriente de Medellín.

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