La Comisión de Discapacidad se encuentra debatiendo por estos días dos proyectos de ley, con marcadas diferencias, tendientes al reconocimiento de la Lengua de Señas Argentina y a la creación de un instituto que tendrá como objetivo promover y elaborar políticas públicas respecto a esta lengua.
En ese sentido, la iniciativa de los Diputados Donkin , Rivas, Puiggros, Guccione y otros que obtuvo el dictamen de mayoría, reconoce a la LSA como una lengua facilitadora del acceso a la comunicación e información de las personas sordas, hipoacúsicas o aquellas que por su discapacidad necesiten usarla para su interacción con el entorno.
Además, crea el Instituto Federal de Lengua de Señas Argentina, dependiente de CONADIS, máximo organismo nacional rector de las políticas públicas en la temática de discapacidad.
Del otro lado, los Diputados De Gennaro , Troiano y otros impulsan una ley basada en el proyecto de la Confederación Argentina de Sordos, por el cual entre otras cosas, impulsa la creación de un instituto que solamente esté integrado por personas sordas y declarándolo “patrimonio lingüístico-cultural de las personas sordas”.
Al respecto, la Coordinadora de Comisión Discapacidad de la Cancillería, Mónica Bianchi, expresó su desacuerdo con el proyecto de la Confederación Argentina de Sordos por considerarlo “discriminiatorio” ya que a su entender “no respeta la convención, los tratados internacionales ni las normativas nacionales y locales vigentes ni recomendaciones de la OMS”.
Finalmente, la ex legisladora dijo que desde la Comisión y las instituciones que ella representa, “apoyamos el dictamen de mayoría porque respeta estas normas y nos incluye e integra a todos y todas las personas con discapacidad de nuestro país”.
Agregó que el proyecto de Rivas y Donkin, reconoce a la LSA como una lengua facilitadora del acceso a la comunicación e información de las personas sordas, hipoacúsicas o aquellas que por su discapacidad necesiten usarla para su interacción con el entorno.
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Además, crea el Instituto Federal de Lengua de Señas Argentina, dependiente de CONADIS, máximo organismo nacional rector de las políticas públicas en la temática de discapacidad.
Del otro lado, los Diputados De Gennaro , Troiano y otros impulsan una ley basada en el proyecto de la Confederación Argentina de Sordos, por el cual entre otras cosas, impulsa la creación de un instituto que solamente esté integrado por personas sordas y declarándolo “patrimonio lingüístico-cultural de las personas sordas”.
Al respecto, la Coordinadora de Comisión Discapacidad de la Cancillería, Mónica Bianchi, expresó su desacuerdo con el proyecto de la Confederación Argentina de Sordos por considerarlo “discriminiatorio” ya que a su entender “no respeta la convención, los tratados internacionales ni las normativas nacionales y locales vigentes ni recomendaciones de la OMS”.
Finalmente, la ex legisladora dijo que desde la Comisión y las instituciones que ella representa, “apoyamos el dictamen de mayoría porque respeta estas normas y nos incluye e integra a todos y todas las personas con discapacidad de nuestro país”.
Agregó que el proyecto de Rivas y Donkin, reconoce a la LSA como una lengua facilitadora del acceso a la comunicación e información de las personas sordas, hipoacúsicas o aquellas que por su discapacidad necesiten usarla para su interacción con el entorno.
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